domingo, 4 de septiembre de 2011

Just a dream

Y es que cuando crees que lo tienes al alcance de las manos,
cuando te piensas que vas a conseguir lo que querías,
que tantas lágrimas derramadas
y, sobre todo, tanto esfuerzo hecho
te van a servir para conseguir lo que tanto querías...
ABRES LOS OJOS
Y vés que aún te queda mucho camino por hacer
que las cosas son aún mucho más difíciles de conseguir.
Que sabes que lo conseguirás, que acabarás teniendo entre tus dedos
la cara de esa persona,
que podrás sonreirle por sentirte feliz por tu felicidad y la suya
que será ese sueño que tanto deseabas.
Pero el tiempo... Pasa, y así, día a día, y sigues con la esperanza de
que algún día esa pequeña personita para ti tan grande
se dará cuenta de que has estado hay siempre, a su espera.
A la espera de que esa persona que en su misma imperfección tú vés la perfección vea lo mismo en ti.
A la espera, de que esa sonrisa que te ilumina el día este siempre ahí porque la tuya consigue robársela.
A la espera, de que por fin sepa que la mirada con la que te miraba no era de simple interés sino que decía las mismas palabras que decías tú siempre con la tuya: un simple TE QUIERO, solo dos palabras con un fondo interminable.
Algún día, SÍ, algún día el destino hará justicia y pasará lo que tendría que haber pasado hace tiempo.
Tengo paciencia pero mi tiempo es muy valioso y pienso darme prisa en conseguir mi objetivo porque cuando quiero algo lo consigo.
No sé ni cómo hacerlo, ni por qué me ha pasado contigo pero te necesito. Porque en tu felicidad veo la mía, cuando tu sonríes: yo sonrío, si tu lloras: yo lloro.
Y es que cuando veo que tus risas las compartes con alguien... se me cae el alma al suelo, me siento impotente, indefensa, sin ganas de luchar...
Pero cuando al momento me vuelves a dedicar una de tus miradas... Recargo fuerzas y sé que no me rendiré así como así!
Te vi tan cerca... Pero abrí los ojos y tan solo era un sueño.
Un sueño que algún día haré realidad.

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